Una banda que merece respeto: The Stranglers

La formación original e histórica de The Stranglers (de izquierda a derecha): Jet Black (batería), Hugh Cornwell (guitarra y voz), Dave Greenfield (teclados) y Jean Jacques Burnel (bajo y voz).

Los Fans de The Stranglers tenemos una frase recurrente: The Stranglers no tiene el crédito que merece. Es que ellos fueron parte de la primera ola del punk rock, abriendo recitales para Patti Smith y los Ramones en sus giras británicas. Pero lo cierto es que los estranguladores fueron una banda  que rompió la brecha que se imponía dentro del punk, conservando una actitud feroz y contestataria pero al mismo tiempo capaces de producir elaboradas melodías.



Cuando los escuché por primera vez, yo venía de escuchar mucho rock brasileño y un poquito de post punk. Escuchar a The Stranglers fue reencontrarme con ese lado desfachatado del rock del cual parecía haberme olvidado. Para los que no sepan ni jota acerca de la banda, esta ha influenciado a artistas argentinos como Luca Prodan (Sumo) y Pil Trafa (Los Violadores), de hecho por sus menciones es que yo me incliné a escucharlos.

Un dato que siempre resulta sorprendente sobre la banda es que todos  sus miembros procedían de ambitos diferentes, sólo Hugh Cornwell tenía cierto bagaje en el mundo del rock, mientras que Burnell provenía del clásico, Jet Black del jazz y Dave Greenfield del prog rock. Aún así, estos elementos se amalgamaron en una música totalmente disruptora: la guitarra bien rockera de Cornwell, el bajo sencillo pero bien al frente de Burnel, el ritmo jazzeado de Jet Black en la batería y el virtuosismo de Dave Greenfield para ejecutar esas delirantes líneas con el teclado. Además, mientras que en la época la mayoría de los músicos punks eran jóvenes que aprendían al compás de aquéllos ritmos rabiosos y sencillos, en The Stranglers (al momento de editar Rattus Norvergicus), sólo Burnel era el más joven con 24 años, Cornwell y Greenfield tenían 27 años y Jet Black 38, por lo cual ya conocían bien el paño de la música y se amalgamaron en una mezcla única y original.

En 1977 sacan su primer disco Rattus Norvegicus. Una mezcla de cinismo, acidez y altos niveles de testosterona. En consonancia con la época, sacan un disco dentro del punk rock aunque sus tempos fueran distintos. Se destacan el punk rock de London Lady y Hanging Around, Princess Of The Streets, el reggae calenturiente -y exitoso- de Peaches, la acidez de (Get a)Grip On Yourself y el final cerrando con la monumental Down In The Sewer (finalizando con los chillidos de ratas, genial).

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Meses después aparece No More Heroes. Siguiendo la misma línea del anterior aunque ciertamente más acelerado y acertivo que el primero. Se desprenden automáticamente dos hits punk como No More Heroes y Something Better Change.  También se destacan el rock and roll furioso de Bitching, I Feel Like A Wog, Bring On The Nubiles y Burning Up Time.

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En 1978 lazan Black And White. Un disco con el que se cierra una etapa en la banda. El virtuosismo le gana a la sencillez en el este álbum. Las composiciones se vuelven más complejas pero siguen conservando la agresividad y la actitud de sus dos registros anteriores. Se destacan temas como Nice 'N Sleazy (espectacular línea de bajo), Sweden (All Is Quiet On The Eastern Front), la espectacular y tormentosa Toiler On The Sea y los bonus tracks de Walk On By (creo que este tema es fundamental para comprender a la banda, o por lo menos para mí fue así) y Mean To Me.

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En 1979 lanzan The Raven, disco que no he escuchado completo, pero que se vislumbra un gran cambio, pasando a melodías más pop y más complejas, el disco parece un prueba y error para lo que viene. Stranglers en una etapa de transición, pero aún así nos entregan dos canciones buenas como Nuclear Device y Duchess.

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El que sí escuché completo es The Gospel According To The Meninblack, que es un álbum conceptual acerca de alienígenas y teorías de la conspiración. El álbum se adelanta por algunos años en conceptos posteriormente utilizados por el rock gótico. Ciertamente no es un álbum fácil de escuchar, requiere de completa atención, quizás no sea de mis favoritos pero aún así se pueden destacar canciones como la siniestra Waltzinblack, Turn The Centuries, Turn; Four Horsemen o Thrown Away. Lo dicho: no esperen un disco de hits.

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En 1981 sacan La Folie y la locura de la banda toma una nueva dimensión. De este se desprende el hitazo Golden Brown, que alcanzó a ser Nº2 en el Reino Unido, sin dudas su canción más representativa. También se destacan canciones como Everybody Loves You When You're Dead, Let Me Introduce You To The Family y la gran canción de cierre que es La Folie, canción que está en francés y que se refiere de manera indirecta a la historia del caníbal japonés Issei Sagawa.

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Los que siguen son álbumes que sólo escuché parcialmente: en 1983 sacan Feline del cual se desprenden canciones como European Female y Midnight Summer Dream. En 1985 lanzan Aural Sculpture del cual destacan Skin Deep y No Mercy, igual vale la pena escuchar este disco completo, puesto que al parecer es el disco en cual está más resuelto el pop de la banda. En 1986 lanzan Dreamtime, del cual sólo puedo recomendar el hitazo Always The Sun. En 1990 lanzan el último disco en que participó Hugh Cornwell, que fue 10 del cual se destacó la versión que hicieron de 96 Tears.

 

Tras la ida de Hugh Cornwell no tengo escuchados más álbumes de The Stranglers, sé que sacaron siete más, incluyendo el último de 2012 llamado Giants. De todas maneras, ha sido buena la incorporación de Baz Warne, prácticamente no se extraña a Hugh Cornwell en el escenario, pero lo cierto es que como miembro original, el ex guitarrista y cantante merece todos los respetos por haber pergeñado tantas buenas canciones. Actualmente el baterista Jet Black toca cada vez menos por razones de salud: es diabético y también ha sufrido problemas cardíacos. Además su edad avanzada también resulta un impedimento al tener 75 años, por eso ha tocado muy poco en vivo en los últimos años, actualmente suele realizar la mitad de los recitales que la banda en el Reino Unido, ya no sale de gira por Europa.

The Stranglers versión 2014 (de izquierda a derecha): Baz Warne (guitarra y voz), Jean Jacques Burnel, Jet Black y Dave Greenfield.

A The Stranglers se los suele ningunear en la historia del punk, nunca vi ninguna review en la que se los destacara por su música y su actitud como una de las bandas fundadoras del género. Quizás no les hayan perdonado sus letras machistas cuando tantos artistas han tenido letras similares. O sus escándalos arriba y fuera del escenario como cuando tocaron en el Battersea Park en un escenario lleno de bailarinas de striptease (¡qué boludez!) o el hecho de que hayan sido tan avanzados para el género y hayan roto la brecha del mismo. No sé, sólo sé que escucharlos no tiene desperdicio. Cuarenta años después de su formación, para mí son una de las mejores bandas del punk rock y se han reinventado muy bien, quizás sean demasiado finos para sólo tocar punk, pero tienen la calle, la actitud y sobre todo las aptitudes musicales como para ser considerados referentes indiscutidos del género.